PORTUGAL 2.014

Desde 2.012 estábamos soñando con esta travesía por la costa portuguesa.

No lo pudimos hacer ni en 2.012, ni en 2.013, pero en 2014 salió una buena ocasión, navegar en conserva con un barco amigo.

El 24 de julio salimos de Pobra con el Rafni preparado, lleno de comida y bebida. Primero nos dirigimos hacia la ría de Aldán, donde fondeamos y pasamos la noche.

Al día siguiente, después de desayunar, nos dirigimos a Baiona, ya que por medio de un conocido teníamos amarre en el elitista Monte Real Club de Yates. Pasamos dos días, donde arreglamos una avería que teníamos en el carro de la mayor.

El 27 amaneció con una densa niebla y salimos rumbo a Viana do Castelo. Toda la travesía la hicimos con niebla cerrada, hasta que  entrando por la bocana del puerto comercial, increíblemente, se levantó de golpe y pudimos entrar admirando la ciudad. Cuando llegamos a la altura del pantalán de espera del puerto deportivo, que se encuentra en el cauce del río, en el exterior de las instalaciones, llamamos por el canal 9 de VHF y nos contestó enseguida Carlos, el contramaestre, que nos dio un amarre en el interior de la marina. Para acceder al interior del puerto hay que esperar a que se abra el puente.

Nuestro destino es el Algarve portugués, así que el día 1 decidimos salir rumbo al sur. El día 2 de agosto descansamos en la Marina de Cascais, 190 millas náuticas, antes de llegar a Lisboa. Nada mas entrar en la marina, hay que amarrar en el pantalán de espera, que está entrando a estribor al lado del edifico de oficinas. Allí nos dirigimos para enseñar nuestros papeles para que nos dieran la tarjeta de acceso a los pantalanes. La marina está muy bien, hay duchas, servicios, restaurantes, tiendas, supermercados, marina seca, gasolinera, ... Además el pueblo está al lado, por lo que se puede ir dando un paseo.

El día 3, por la mañana, salimos dirección Lagos, 125 millas náuticas, con un excelente viento N que nos hacía volar. Pasamos por el cabo de San Vicente en la madrugada del 3 al 4 y antes del amanecer llegamos al pantalán de espera de Marina Lagos, donde esperamos a que abrieran las oficinas y nos dejasen pasar a nuestro amarre. La entrada al canal es peligroso por los bajos, por lo que conviene seguir las marcas o bien dar bien resguardo a babor. Para acceder al interior de la marina hay que llamar por el canal 9 de VHF para que nos abran el puente. Esta marina está muy cuidada y tiene muchos servicios. Hay hotel, apartamentos, centro comercial, restaurantes, vigilancia 24 horas, gasolinera, una gran marina seca y una excelente tienda náutica donde si no tienen lo que buscas, te lo piden y lo suelen tener en pocos días.

Lagos es muy turístico. Hay excursiones en barco, en kayak, buceo, motos de agua,bicicletas, ... Además en el pueblo hay muchas cafeterías, bares, restaurantes y en cuanto el sol no calienta tanto, empieza un mercadillo en el paseo al lado del canal de entrada. Por cierto aquí nos pasó algo muy curioso y os lo aviso para que no os pase a vosotros. Veréis que hay bancos españoles, Popular,  Santander, .... cuidado porque son bancos portugueses y te cobrarán comisión por sacar dinero en los cajeros. A nosotros nos cobraron 9€ por sacar 200€ y no te avisan, así que te enterarás cuando vuelvas a casa.

Por cierto hay un buen sitio al lado de la marina, cerca de la estación de tren, donde dan buenas sardinas a la brasa y vino portugués.

Estuvimos hasta el día 8, que ya dormimos en el pantalán de espera, ya que el puente que da acceso a la Marina solo se abre en horario de la oficina a las 8 a 22 horas en verano.

La travesía de vuelta la empezamos con calma e hicimos noche en Sines (80 millas náuticas), donde encontramos un puerto deportivo pequeño, pero con todas las comodidades, luz, agua, duchas, servicios, WIFI, vigilancia 24 horas y con un excelente precio.

El día 9 salimos hacia Cascais, pero la meteo no era muy buena, por lo que decidimos seguir hasta Figueira da Foz (150 millas náuticas). Hasta pasa las islas Berlengas la navegación fue muy placentera, viento escaso y hasta cenamos en la bañera, pero al acercarnos hacia Figueira se fue levantando el viento y el mar y la llegada, en la madrugada del 10, resultó bastante pesada, cogiendo hasta el 2º rizo. En Figueira nos quedamos un día entero, para descansar.

El día 12 llegamos a la Marina Douro, magnifica marina, muy cerca de la ciudad de Oporto, lugar que merece la pena quedarse unos cuantos días para conocer todo lo que te de tiempo. Aunque el puerto está en la orilla opuesta, no se tarda una hora dando un buen paseo. Esta orilla del río Duero pertenece a Vilanova de Gaia y es donde están las famosas bodegas de oporto, porto en portugués.

En este puerto se pueden ver barcos de motor españoles que vienen a subir el río, navegable hasta casi la frontera española.

El 14 salimos hacia Viana do Castelo donde dejamos el barco en el pantalán exterior, ya que al día siguiente íbamos a salir  temprano para llegar a Pobra.

Portugal nos ha gustado mucho y esperamos repetir en 2015, aunque nos gustaría conocer mas los sitios donde vayamos, por lo que vamos sin agenda ni calendario. Vamos a estar en los sitios hasta que pensemos que tenemos que cambiar de marina.